El Sueño De La Diosa

El Sueño De La Diosa

Por: Carolina Contreras

Muchas veces elegimos las plantas con las que trabajamos. A veces, ellas son las que nos eligen.

Estaba comprando las hierbas para mi primera huerta, cuando vi una larguirucha, quemada y escuálida, luchando por su vida.

—¿Qué es?— le pregunté intrigada.

—Artemisa.

—¿Tienes más?

—Es la única.

La compré. Sabía que servía para las pulgas de los perros y quería ver qué tal. La sembré y la olvidé.

Estuve hospitalizada en julio de 2020 por una biopsia renal.

Empecé a retener líquidos, se me disparó la tensión y estaba eliminando demasiadas proteínas por la orina. Tocaba ver qué pasaba. Como ya estábamos en pandemia, la antaño biopsia ambulatoria se convirtió en un circo de 3 días.

Para el equipo de trasplantes, se me había reactivado el Lupus.

—Yo no tengo Lupus. Mi nefrólogo lo sabe. Hasta el trasplante me hicieron mil exámenes buscando Lupus. Todo daba negativo. Lo que mostró mi primera biopsia renal es compatible con la nefritis lúpica, pero hasta ahí. El Lupus puede dañar los riñones, así como la diabetes. Pero no todos los daños renales son por diabetes o por Lupus.

—Como se reactivó tu Lupus, queremos que te hagas 6 sesiones de una droga que te va a ayudar mucho. No te asustes cuando leas en la orden: “quimioterapia”. Realmente no es una quimioterapia sino una droga que ayuda con el Lupus.

—“No te preocupes, no es una quimioterapia, sólo nos encanta decirle así. El apodo pone a los pacientes en el estado mental apropiado”.

—¿De qué habla? Es importante que se haga las sesiones. Tenemos que frenar el Lupus.

—Inmediatamente.

Salí de la clínica y decidí investigar los tratamientos alopáticos para el lupus. ¿Seis sesiones de quimioterapia? ¿En la cabeza de quién?

Vi que ademas de los inmunosupresores, la gran novedad para el Lupus era que se estaba tratando fuertemente con drogas para la malaria.

¿Coincidencia increíble?

La Artemisa larguirucha de otros tiempos se había transformado en mi casa en una planta preciosa, abundante, sana y resistente; protectora principal de la cama en la que habita. Sobrevivió a heladas de gruesas capas de hielo en el suelo de madrugada y días de 32 grados en la sabana, en los que helaba y nunca llovía.

La Artemisa es el mejor tratamiento del mundo para la malaria y yo la tenía en mi casa. Era una planta frondosa y resistente, extremadamente fuerte y muy flexible. Imparable. Ella siempre estaba regia.

¿Para qué más serviría?

USOS MÉDICOS DE LA ARTEMISA

La Artemisa se ha usado desde tiempos inmemoriales para tratar las fiebres intermitentes de la malaria, la tuberculosis, las heridas y la disentería. Más recientemente se ha usado para tratar osteoartritis, leucemia, cáncer de colon, carcinoma de las células renales, cáncer de seno, cáncer de pulmón, cáncer de próstata y hepatoma.

Tiene acciones inmunoreguladoras, antiadipogénicas, antiulcerogénicas, antiasmáticas, anticonceptivas, antihelmínticas y antiosteoporosis.

Es desparasitante, antibacteriana, antiviral —cura el COVID— y es increíblemente desinflamatoria. Es un anticancerigeno muy potente —del nivel del cannabis—, podría acabar con la epidemia de diabetes, protege el hígado y el riñón, alivia y desinflama el estómago, regula el ciclo menstrual y ayuda con los problemas del útero, quita los cólicos y repara pulmones rotos.

La encontré muy quemada, luchando por su vida, tal y como yo había estado unos años antes. Jugándosela. Y así llegó a mí.

Me mostró que podía acercarme a ella y conocerla, me contó que si me abría a su campo sutil, allí guardaba sus secretos más dulces, los que estaban dispuestos a ligarse con otras especies para impulsar la vida y promover las energías de las plantas: la belleza, la empatía, la compasión, la armonía, la elegancia, la comprensión y la fuerza transformadora del campo del corazón.

VOLCÁN

Mi hermana adoptó un gatito que se estaba muriendo. Tenía neumonía. Muy mala. Mejoró pero a las dos semanas se salió en una tormenta. Otra neumonía. Casi no se salva. Poco tiempo después se partió la columna. No podía saltar ni correr, no movía la cola, se escondía detrás de la nevera y lloraba todo el tiempo. Antes de que lo viera el médico, pensé qué podía hacerle, qué podía ayudarlo.

Hice un oleato de hierbas desinflamatorias en que el 65% era Artemisa. Empezamos a darle medio goterado, una o dos veces al día. Cuando lo vio el veterinario, nos dijo lo de la columna, muy triste.

Seguimos dándole el aceite.

A los dos meses, Volcán estaba encima del techo, cazando pajaritos.

ARTEMISA: LA DIOSA

La Artemisa habita muchos espacios.

En la esfera mitológica es la diosa de la caza y de la luna, una diosa virgen que simboliza la actitud de puedo cuidar de mi misma, que permite que las mujeres vivan con autoconfianza e independencia.

Según Jean Shinoda Bolen:

“El arquetipo de Artemisa proporciona a las mujeres la capacidad innata para concentrarse intensamente en cualquier cosa que sea importante para ellas y para no ser distraídas de la dirección que eligen, ni por las necesidades de los demás ni por su competitividad. A lo más, competir aumenta la animación de la caza. El enfoque sobre la meta y la perseverancia a pesar de los obstáculos del camino o del carácter esquivo de la presa son cualidades de Artemisa que conducen a logros y éxitos. Este arquetipo posibilita dar en el blanco elegido” .

Jean Shinoda Bolen, Las diosas de cada mujer. Una nueva psicología femenina, Kairós, Barcelona, 1993.

Las cualidades de la diosa se ven en la planta: no se distrae, es perseverante y se enfoca en conseguir la meta. No se rinde ante los obstáculos. Da en el blanco elegido. Se inclina a explorar nuevos territorios. Se expande. Tiene intensidad.

Cura el COVID.
Cura la malaria.
Cura la tuberculosis.
Desparasita.
Cura la diabetes.
Desinflama.
Repara los pulmones.
Alivia el sistema óseo.
Es inmunómoduladora.
Cura el cáncer.
Repara las fracturas de columna de los gatitos.

La Artemisa es guardiana de los sueños, facilitadora de sueños lúcidos y guía para escuchar los deseos profundos del corazón.

Es una planta que aclara nuestra consciencia y abre nuestros canales, permitiendo la transmutación de las emociones y el trabajo de los malestares, dolores y traumas que bloquean nuestra energía y tergiversan nuestra percepción.

Quiero decirle a la Artemisa que la adoro y le agradezco la gentileza de haberse puesto en mi camino, de llamar mi atención hacia ella y acercarme a su magia y belleza.

Gracias Artemisa maravillosa por dejarme intuir el potencial de tu poder y tu sabiduría.

Nos queda toda la vida.

Volver atrás

0 Comentarios sobre

"El Sueño De La Diosa"

    Deja una respuesta

    Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

    Suscríbete a nuestro

    Boletín


    Todos los derechos reservados VerdeBendita 2022 - Diseño web BrandSavers.co